lunes, 25 de junio de 2007

Lo que ahora sé



Este fin de semana estuve con mucha gente, alguna que quiero y otra que no tanto. Y de verdad que no deja de sorprenderme la gente, tanto para bien como para mal.

El jueves en la noche salí de la oficina, me fui al gimnasio y luego me fui a casa de una muy querida amiga a platicar y a echar unas chelas. La verdad que la noche estuvo muy divertida, platicamos de muchas cosas, nos reímos, nos regañamos, en fin un chorro de cosas que no con todos los grupos de amigos tengo.

Me llevé buenas sorpresas ese día. Un amigo al que quiero mucho, tiene muchos problemas con el alcohol, no puede pasar un fin de semana sin que tome, porque si esto pasa siente que fue una gran pérdida de tiempo. Para mi sorpresa a la1:30 a.m. más o menos se fue porque no quería tener problemas en su casa (siendo de las personas que si agarra la peda puede no regresar en su casa por 3 días seguidos), lo cual me hizo sentir que sí puede ser un poco responsable cuando quiere.

Otra sorpresa que tuve fue que yo pensaba que al novio de mi amiga (la de la casa) no le caía del todo bien. Pero platicando el jueves con él creo que no podía estar más equivocado. Creo que sí le caigo bien y tenemos un poco más en común de lo que yo pensaba.

Descubrí que mi amiga, la dueña de la casa a la que fui, sí me hace caso y pone atención a las cosas que platicamos tanto por msn como por teléfono o la rara ocasión que nos veamos, eso me dio mucho gusto ya que a veces siento que mis cosas no les importan a los demás.

Me di cuenta de que mi amigo que se fue a vivir a Mérida nos extraña más de lo que nosotros creemos y más de lo que él acepta. Yo creo que allá se siente solo y no sabe como hacer para regresar al DF por lo difícil de la situación. Pero sí sé que fue igual de difícil tomar la decisión para irse a Mérida.

Me encontré el viernes a mi jefe en un bar y contrario a lo que yo pensaba está harto de trabajar aquí y sí le gusta lo que hace, pero cada vez se da más cuenta que aquí lo único que está haciendo es engordarle la cartera al dueño a costa de su salud y de su vida personal. Me confesó que no es feliz con la persona que está compartiendo su vida por las diferencias enormes e irreconciliables que tienen. Creo que la vida de mi jefe no es tan feliz como todos pensábamos que era, ahí sí veo que el dinero no da la felicidad (aunque cómo ayuda).

Si quieres que alguien te haga caso trátalo mal, no le llames, no le contestes, déjalo plantado e inventa planes cuando hayan quedado de verse. Verás que no podrá dejar de pensar en ti, igual con coraje o con ganas de domarte. Esta sí es una situación muy triste en la cual espero no estar nunca más.

Sentí que un amigo se ofendió conmigo porque no le quise dar un aventón de mi casa a Periférico y prefería pagarle la mitad del taxi hasta su casa, pero ya estoy aprendiendo a decir que no, y menos cuando me siento tan mal de la cabeza o del estómago. Ni modo espero la muina no le dure mucho tiempo porque nadie está obligado a hacerle favores a nadie.

Fui al teatro a ver “Hoy no me Puedo Levantar” y me di cuenta que me hubiera gustado ser actor de teatro, recibir los aplausos y cantar chingón.

La gente entre más veces dice que no le va a pasar cierta cosa, lo acaba atrayendo como por arte de magia.

No tenemos que ser buena onda con todos, a veces se vale ser mala onda y la verdad se siente bien el no tener que saludar a quien no quieres saludar, y menos poner cara de menso, como si te cayera bien el wey.

El sábado hay la peor programación en la TV de toda la semana, en todos los canales hay pura mierda.

Creo que los amigos que tengo en este momento son los amigos con los que quiero envejecer. Vendrán nuevos amigos pero ninguno tan importante como los que he hecho hasta ahorita. Adoro a la gente que me rodea hoy día y espero que mi relación con todos crezca.

A la gente con mala leche les va mal, la vida les cobra todo de una u otra manera, y descubrí que me da mucho gusto que a la gente que se lo merece le vaya mal.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ah si... pero que bien la pasamos y qué bueno que te quitaste algunas telarañas de la cabeza, si te adoro, no te has dado cuenta que aunque no sea de todos los fines contigo platico de mil cosas y te has convertido en alguien super importante para mi. No por eso eres un "top 6" de mi Hi5.

Besos...

Unknown dijo...

Hola, acabo de leer la muerte del Palomo, no se como llegué a tu blog, pero está bueno. Me entretuve con la historia, aunque es dolorosa, tiene puntos de encuentro con historias cercanas, con personajes parecidos. En fin, lo padre de contar nuestras historias es jugar con ellas, decretar, matar a los personajes, ficcionarlos llevarlos al borde... y ante todo sanarnos. Sin psicoanalisis. Y sin miedo en cualquier lugar del blog podemos poner una liga que nos lleve al comienzo de la historia (genial la foto de la chimoltrufia), entonces nuestros cuentos se llenan de ventajas y podemos cambiar la historia. Si nos dejamos, si nos damos tiempo. (como en Lucía y el sexo) www.nuevaspuertas.blogspot.com

ANDI dijo...

Te extraño. No sabes, al leer tu blog me dieron tantas ganas de volver a México...
Me dieron ganas de estar rodeada de nuevo de mis viejos amigos.
Te mando un beso y espero poder verte pronto.